Última reseña de este año 2016 que ya tiene un pie en la tumba. Tres semanas sin publicar nada, no es que tenga el blog abandonado, lo que pasa es que he tardado ese tiempo en leer "IT", una bestia de más de 400.000 palabras (1336 páginas) con la que estado peleando unas 27 horas. Uno de los pocos libros que te puede garantizar una horita de lectura diaria durante un mes, idóneo para llevar de vacaciones, sino fuera por su enorme peso, menos mal que con el lector de libros electrónico los problemas de peso pasaron a la historia.
"IT" con treinta años a sus espaldas (1986) sigue siendo una novela referente del autor más consagrado en el género del terror.
Algo pasa en Derry, una olvidada población de Maine sufre cada veintisiete años extrañas desapariciones de personas, casi todos niños. En 1958 el hermano menor de Bill "el tartaja" desaparece, su sentimiento de culpabilidad crece a la vez que sus ganas de atrapar a "Eso" que se ha llevado a su hermano.
Se forma un grupo muy curioso de niños, se hacen llamar "los perdedores". Bill a la cabeza, Eddie un endeble niño que sufre de asma, Richie el payasete del grupo, Mike el marginado por ser negro, Ben el gordo, Stan el judío, y Beverly la niña maltratada por su padre. Todos ellos tienes algo en común, sufren el acoso de Henry, un abusón de su colegio y su pandilla. Por separado no tienen nada que hacer contra él, pero juntos son capaces de plantarle cara a Henry, e incluso a "Eso".
"Eso" se aparece a los niños con diferentes formas: Un payaso, una momia, un pájaro gigante, un leproso, y les hace ver cosas que sólo ellos pueden ver.
Bill contagia los deseos de venganza por su hermano al resto del grupo, y todos ayudan a encontrar y luchar contra "Eso". Después del traumático encuentro con la cosa prometen volver al reunirse si "Eso" volviera a aparecer en Derry.
Veintisiete años más tarde, Mike el único del grupo que ha permanecido en Derry, convoca al resto de amigos, "Eso" ha vuelto otra vez, hay que reunir al grupo y liquidarlo de una vez por todas.
Reconozco que me ha costado ponerle nota, en el fondo hay que quitarse el sombrero ante la narrativa de S.King, empecé el libro con muchas ganas, pero la acción se eterniza y se alarga más de lo necesario. Aún así, los personajes están muy bien trabajados, cada uno de ellos con sus puntos fuertes y débiles.
En el fondo "Eso" representa los miedos que cada uno lleva dentro, los potencia y se alimenta de ellos. Quizá lo más emblemático de "Eso" es la figura de ese payaso macabro que asusta a los niños, pero "Eso" está ahí desde hace mucho tiempo, rememorando nuestros miedos ancestrales.
Nota: 8,5/10